El gasto en pirotecnia para el Carnaval de Mazatlán en 2024 fue cinco veces más que el presupuesto anual para reforestación de la ciudad y 12 veces más de lo que se destina al programa de fumigaciones y descacharrización. También representa casi dos terceras partes de lo destinado al Instituto Municipal de la Juventud.
La pirotecnia es un contaminante potente y diverso que afecta no sólo las playas y la calidad del aire, también es un contaminante auditivo para el ser humano y nuestras mascotas, sin embargo, el Gobierno de Mazatlán ha mantenido la práctica histórica de destinar millones de pesos de recurso público en la adquisición de fuegos artificiales para “iluminar” carnavales, como si se tratara de una prioridad, siendo el Combate Naval, en la zona de Olas Altas, el evento tradicional donde más detonaciones ocurren, pues se llegan a registrar más de 10 mil descargas en cuestión de minutos.
A unos días del inicio del Carnaval Internacional 2025, titulado “La Perla”, hablemos de los impactos negativos que nos dejan los fuegos artificiales, los altos costos en distintos aspectos y la omisión institucional que, por años, ha prevalecido para diseñar e implementar acciones que reduzcan y mitiguen la contaminación que nos dejan.


De acuerdo con la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) en la pirotecnia se mezclan neutralizantes, oxidantes y aglomerantes, además el perclorato de sodio que da propulsión, los metales pesados aportan el color y los aerosoles producen la detonación; ya en el aire, esa mezcla libera monóxido de carbono (CO) y partículas suspendidas que, al ser inhaladas y llegar directamente al fondo pulmonar, provocan daños a la salud; pero eso no es todo: el perclorato de sodio que detona la cohetería cerca de los cuerpos de agua aumenta hasta un millar de veces los niveles normales y daña a microorganismos y fauna acuática. En los últimos años organizaciones de sociedad civil se han manifestado por su uso, ya que también impacta en las mascotas, pues las detonaciones están relacionadas con estrés, angustia y miedo.


Aunque las autoridades conocen de estos impactos a la salud y a nuestras playas, porque los conocen perfectamente, siguen invirtiendo en pirotecnia como se tratara de prioridad, siendo que son contaminantes, cuyos residuos llegarán a nuestras playas por distintas vías, esto resulta increíble que un contexto de crisis ambiental por el calentamiento global y la alta carga de contaminación que representan los residuos para nuestra bahía. Para empezar, es importante que las autoridades reconozcan y asuman que el uso de fuegos artificiales representa prácticas nocivas y que tienen todos los recursos a su alcance para diseñar proyectos que sustituyan la pirotecnia y apostar por carnavales más sustentables y no es una idea descabellada, si se comienza con pequeñas acciones donde se involucre a la ciudadanía poco a poco transitaremos a mejores prácticas.
Gastos comparativos
La realidad es otra, en Mazatlán se sigue destinando más presupuesto municipal para fuegos artificiales de carnavales que para atender áreas que representan, desde mi perspectiva, mayor prioridad por el beneficio social. Por ejemplo, el año pasado el Instituto Municipal de Cultura, Turismo y Arte de Mazatlán, destinó 4.3 millones de pesos para la adquisición de pirotecnia para todos los eventos del Carnaval, 300 mil pesos más de lo presupuestado, esto de acuerdo con información que solicité vía Transparencia donde Cultura reconoció que rebasó el recurso destinado.
Si ustedes se preguntan ¿a cuánto equivalen 4.3 millones de pesos?, aquí les comparto un ejercicio que ayudará a dimensionar. Esto que Cultura gastó en pirotecnia para el Carnaval de 2024 representa cinco veces más el presupuesto municipal destinado este año a las acciones de Reforestación de la ciudad, pues ese programa apenas tiene etiquetado 764 mil 080 pesos para 2025; también equivale a 12 veces el presupuesto para el programa de Fumigaciones y Descacharrización de la ciudad; es incluso, igual al 70 por ciento del presupuesto destinado para el Instituto Municipal de la Juventud este año, ya que apenas tiene seis millones de pesos para 2025 y en un contexto de violencia generalizada que enfrenta el Estado, las acciones orientadas a la juventud y el fortalecimiento de esas dependencias representan mayor prioridad que invertir en pirotecnia. No tengo duda.
En 2023 el gasto en pirotecnia fue menor, ya que se presupuestaron 4 millones de pesos y gastaron 3.1 millones. Sin embargo, en 2022 no fue así, ese año el Gobierno de Mazatlán sí despilfarró al destinar, sólo para fuegos artificiales, seis millones de pesos, casi un millón de pesos más de lo que el Instituto de Cultura tenía etiquetado, en mi opinión fue un despilfarro de recurso público, un gasto innecesario cuando sabemos que Mazatlán tiene problemáticas urgentes no atendidas por años, ese recurso público se puede usar en proyectos de mayor alcance como mejores ciclovías seguras, rescate de parques, herramientas de limpieza profunda de playas o programas para recuperar esteros con alta contaminación.

¿Cuánta pirotecnia detonan?
Desde una mirada más social, es importe reconocer que los fuegos artificiales están relacionados directamente con la máxima fiesta del puerto y la sociedad así lo exige, la pirotecnia tiene que ver con identidad, espectáculo, fiesta y un ambiente cosmopolita, tanto, que las instituciones han hecho costumbre o tradición el uso excesivo a costa del erario para transmitir sensación de abundancia. Me atrevo a señalar que hay gobiernos que miden el éxito de su mandato en la celebración de un carnaval, mientras más ostentoso y oneroso, mejor Gobierno.
Y precisamente tenemos en puerta el Carnaval Internacional 2025 del 27 de febrero al 04 de marzo, donde seremos testigos del uso desmedido de pirotecnia; y en el marco de esta máxima fiesta, el sábado 01 de marzo se celebrará el Combate Naval a lo largo de la bahía, siendo Olas Altas la zona de mayor concentración, éste es el evento es donde más se detonan fuegos artificiales, sólo el año pasado, el Instituto de Cultura detonó cerca de 11 mil descargas de pirotecnia y gastó 2.5 millones de pesos, sí, para un espectáculo de minutos.

Los siguientes eventos donde más pirotecnia se utiliza en un Carnaval son las coronaciones de reinas, quema del Mal Humor y en menor cantidad en los tradicionales desfiles del paseo costero.
Y si esto no fuera poco, las autoridades detonan cohetes como si tuvieran un programa de mitigación de daños, cuando la realidad es que no existe un plan para reducir los impactos contaminantes, principalmente en las playas, basta ver las barricadas de pirotecnia que se instalan a lo largo de la bahía para el Combate Naval, donde se recrea la defensa del puerto contra tropas francesas, un acto heroico que ocurrió en 1864 y que las autoridades apuestan a ese espíritu de lucha y valentía para gastar en toneladas de pirotecnia.
En ese contexto, nos queda claro que son millones de pesos los que se destinan abiertamente a prácticas nocivas para nuestros recursos naturales, es momento que las instituciones sean capaces de diseñar mejores formas de celebrar. Hay casos de éxito como en China donde han prohibidos los juegos artificiales para reducir la contaminación, incluso se prohibieron para los Juegos Olímpicos de Pekín 2022 lo que se reflejó en una mejor calidad del aire de la ciudad, de acuerdo con información de la revista Forbes. Si queremos un Carnaval Internacional adoptemos medias de éxito internacionales. Es posible, sí, sólo nos falta voluntad política y más involucramiento de la ciudadanía para colaborar y vigilar cumplimiento.

*La autora es periodista, activista en temas anticorrupción, tallerista en proyectos de Transparencia y medio ambiente; y estudiante de la carrera de Sociología y Derechos Humanos. @Sheila_Arias_ FB: Sheila Arias