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    Monitoreo bacteriológico de playas; resultado 2025

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    Este periodo vacacional de semana santa 2025, seis playas de México no son aptas para su uso recreativo, así lo informó la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS) después de realizar el monitoreo bacteriológico Playas Limpias. Las playas Rosarito, Rosarito I, Tijuana y Tijuana I en Baja California, Playa Icacos en Acapulco y Playa Sayulita en Nayarit rebasaron las concentraciones máximas de 200 Enterococos fecales por cada 100 mililitros de agua.

    En Mazatlán, todas las playas son aptas para su uso vacacional.

    Las bacterias del género Enterococcus son parte de la microbiota  intestinal de los humanos y animales, son microorganismos altamente resistentes a cambios de pH y temperatura; por ello, su presencia en el ambiente es utilizada como un indicador de contaminación fecal en las playas. Estas bacterias llegan a las playas desde distintas fuentes; sin embargo, su alta concentración está relacionada con el desarrollo urbano, sobre todo en zonas con actividad turística, industrial o portuaria que cuentan con un deficiente tratamiento de aguas residuales.

    El contacto prolongado con las bacterias fecales representa un riesgo para la salud, pueden ocasionar infecciones en la piel, infecciones estomacales y en caso más graves endocarditis o bacteriemia, que es la presencia de bacterias en la sangre.

    Panorama Global

    De acuerdo con el Programa de Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente (PNUMA), a nivel mundial se producen 330 mil millones de m3 de aguas residuales cada año y se sugiere que cerca del 37% de las aguas residuales domésticas regresa al medio ambiente sin un tratamiento adecuado; del 63% restante el 52% recibe algún tipo de tratamiento y solo el 11% es reutilizado.

    En México, la Norma Oficial Mexicana NOM-001-SEMARNAT-2021 establece los límites permisibles de contaminantes en las descargas de aguas residuales en cuerpos de agua como esteros, lagunas, ríos o zonas marinas. Entre los parámetros que regula esta norma se encuentran el Nitrógeno total, el pH, grasas y aceites, así como la concentración de Enterococos fecales y huevos de helmintos.

    El agua residual que es vertida en ríos, lagos y océanos sin un tratamiento previo contiene concentraciones altas de nutrientes, sustancias tóxicas, y materia orgánica que degradan el medio ambiente. La degradación de los ecosistemas repercute en los servicios ambientales que benefician a los seres humanos, como la filtración del agua y el abastecimiento de alimentos.

    Aguas Residuales en Mazatlán

    De acuerdo con la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), Mazatlán cuenta con 14 plantas de tratamiento de aguas residuales, de las cuales cinco vierten el agua tratada al estero Urías. Destacan las Plantas de Tratamiento de Agua Residual Urías I y Urías II que en 2023 trataron 480 litros de agua por segundo. Este cuerpo de agua también es receptor final de vertidos acuícolas y del sector portuario.

    El estero Urías se encuentra rodeado por manglares y alberga una gran diversidad de aves acuáticas como el martin pescador (Ceryle alcyon), la gaviota pico amarillo (Larus delawarensis) y el pelícano café (Pelecanus occidentalus); sin embargo, se encuentra fuertemente alterado por la urbanización.

    De acuerdo con un estudio realizado en 2018 por el Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo, en la entrada del estero, cerca del océano, y al centro, las aguas son renovadas de manera natural en un periodo de 5 a 7 días, lo que permite un circulación constante del agua; sin embargo, en la parte final el intercambio de agua es más lento y los contaminantes permanecen más tiempo en el cuerpo de agua.

    El estero Urías también está amenazado por la contaminación de microplásticos (partículas menores a 5 milímetros). Investigadores del Instituto de Ciencias del Már y Limnología de la UNAM analizaron la variación de estas partículas en el estero y determinaron que el polímero más abundante es el PET, debido al consumo excesivo de este material y a la mala gestión de residuos.


    Betzi Pérez
    Betzi Pérez
    Estudiante de la Licenciatura en Manejo Sustentable de Zonas Costeras en la Universidad Nacional Autónoma de México. Miembro de la Red Mexicana de Periodistas de Ciencia.