Más
    InicioCiudadEn Mazatlán se desconoce la calidad del aire que respira la población...

    En Mazatlán se desconoce la calidad del aire que respira la población y los efectos de la contaminación atmosférica

    -

    • La falta de información pública y oportuna sobre la contaminación atmosférica en Mazatlán mantiene a su población ‘ciega’ ante la calidad del aire que respira y los efectos que esta podría tener en la salud humana y ambiental. 
    • Científicas ya estudian evidencia los efectos dañinos de la contaminación del aire en el suelo de Isla Venados y en peces.

    A pesar de ser una responsabilidad del Estado, los mazatlecos no cuentan con información clara y oportuna sobre la calidad del aire que respiran. 

    La presencia de capas de humo en la ciudad es habitual. Por ejemplo, la mañana del 7 de enero de 2025 se observó una columna de humo que se esparció sobre varias colonias ubicadas en la salida norte de Mazatlán. Anteriormente, Son Playas ha recibido reportes de quema de basura en esa zona, incluyendo un predio en el que se realizan rellenos con escombros, ubicado junto al Libramiento Mazatlán.

    El 25 de enero también se pudo observar frente al malecón de Mazatlán una densa nube de aire negro que, a reserva de un análisis más detallado, la científica Magdalena Bergés señaló como portadora de material particulado contaminante. 

    “Debe haber mucho material particulado en esas nubes”, indicó la doctora en Ciencias del Mar y Limnología, con especialidad en geoquímica y evaluación de daños al ambiente. 

    Al no haber en Mazatlán un sistema de monitoreo activo, los mazatlecos no cuentan con información que les pueda advertir sobre la calidad del aire que están respirando ante apariciones de nubes negras, o durante eventos como el incendio del basurón de Mazatlán ocurrido en marzo y noviembre del año pasado. 

    Esto, a pesar de que la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente (LGEEPA) establece, en su artículo 112, fracción VI, que los gobiernos deben establecer y operar sistemas de monitoreo de calidad del aire.

    calidad del aire
    Una capa de humo cubrió la zona costera el 25 de enero pasado. Foto: Son Playas
    calidad del aire
    una capa de humo cubrió la bahía de Mazatlán. Esta no es la primera ocasión en que se observa un fenómeno similar. Foto: cortesía de Cerritos Tourtles.

    Y a pesar también de que la Norma Oficial Mexicana 156 de la Semarnat (NOM-156-SEMARNAT-2012) establece que la contaminación atmosférica debe ser monitoreada y la información difundida entre la población de toda ciudad mayor a 500 mil habitantes, como lo es el puerto de Mazatlán. 

    Para cumplir con está obligación, los sistemas de monitoreo de la calidad del aire (SMCA) deben contar con estaciones de medición, sistemas de acopio y transmisión de datos, centro de cómputo/control, oficinas administrativas, personal capacitado, e información meteorológica apropiada, con base en la operación de instrumentos instalados en la propia estación como pueden ser veleta, anemómetro, termómetro, pluviómetro.

    Además, la norma también anticipa y obliga a los gobiernos a contar con un área y  un programa de mantenimiento preventivo que establezca, entre otras cosas, la frecuencia del mantenimiento de estaciones, instrumentos de medición y equipos de soporte, así como programas de sustitución de los mismos. 

    Pero al revisar la estación de monitoreo de Mazatlán en el Sistema Nacional de Información de la Calidad del Aire (SINAICA), se puede observar que está aparece como no conectada y en mantenimiento. Esto por lo menos desde enero del 2024 y al igual que las otras estaciones integradas en el SINAICA, como las ubicadas en Los Mochis y Culiacán.

    Ante está situación, la titular de la Secretaría de Bienestar y Desarrollo Sustentable (SEBIDES), María Inés Pérez Corral, ha señalado que ninguna de las estaciones de monitoreo ubicadas en Sinaloa están operando por falta de mantenimiento. 

    Esto a pesar de que durante los últimos 3 años, el presupuesto estatal asignado a está tarea ha rondado entre los 3.2 y 3.6 millones de pesos, según un reporte periodístico publicado por la Revista Espejo. 

    Monitoreo de la calidad del aire en Mazatlán

    Hasta inicios de agosto del 2024, Mazatlán sí contaba con una estación de monitoreo perteneciente a la red de Redspira, una iniciativa de responsabilidad social de la empresa de software Certuit surgida en el 2018 en la ciudad de Mexicali, Baja California; una de las ciudades con peor contaminación atmosférica en México y Latinoamérica. 

    La iniciativa, que actualmente monitorea la calidad del aire en una decena de municipios a lo largo y ancho del país, también ha desarrollado un sensor de bajo costo que mide solo partículas suspendidas de 2.5 y 10 micrómetros (PM2.5 y PM10) en tiempo real. Además de ser de fácil instalación y resistir a condiciones de intemperie. 

    Uno de estos sensores era el que, hasta el 9 de agosto del 2024, monitoreaba la calidad del aire en Mazatlán desde la zona de Prados del Sol, brindando información valiosa a la ciudadanía en contextos relevantes como el incendio del basurón del 23 de agosto del 2024, el cual generó una semana completa de contaminación atmosférica en niveles peligrosos para la salud, lo cual fue documentado en el portal de la Revista Espejo.

    Ese día, los habitantes del puerto de Mazatlán amanecieron envueltos en una densa nube de humo que mantuvo al puerto con niveles de mala y muy mala calidad del aire hasta por una semana.

    calidad del aire
    Resultados del monitoreo de la calidad del aire durante agosto de 2024 en Mazatlán.

    Los niveles de contaminantes registrados según el índice mexicano Aire y Salud (menos estricto que otros como el Air Quality Index de Estados Unidos o la directriz 2005 de la OMS), requerían medidas como evitar las actividades físicas y permanecer en espacios interiores durante las horas con mayor contaminación. Sin embargo nadie se lo dijo a la ciudadanía. 

    Más recientemente, a finales de noviembre pasado, un nuevo incendio en el basurón cubrió de humo la ciudad, pero en está ocasión el sensor de Redspira no lo midió, pues el aparato dejó de envíar información a la red desde principios del mes de agosto. 

    Instalan nuevos sensores de monitoreo

    Ante está situación, Diana Cecilia Escobedo, Doctora en Ciencias Marinas e investigadora en el CIIDIR Guasave, logró la aprobación de un proyecto por parte del IPN para instalar sensores de monitoreo Kunak, los cuales miden todos los contaminantes criterio normados en la ley, como son el monóxido de carbono, óxidos de nitrógeno, ozono y partículas de azufre. 

    Actualmente, señala, se han instalado uno en Culiacán, otro en Mazatlán y uno más en Los Mochis. Un paso posterior será el verificar los datos entregados por cada uno de estos sensores de alrededor de 250 mil pesos de valor; otro, el desarrollar una plataforma pública para poner está información a disposición de la ciudadanía. 

    Sin embargo, añadió la Doctora Escobedo, la idea es que el Gobierno de Sinaloa haga su parte y ponga en operación las cuatro estaciones de monitoreo inscritas al Sistema Nacional de Información de la Calidad del Aire (SINAICA).

    “Lo que nosotros pudimos hacer fue comprar unas cabinas, unos detectores de calidad de aire completísimos, con todos los sensores que marca la norma; aunque no son los métodos oficiales, sino que son de bajo costo. Estos nada que ver con las cabinas oficiales, que esas valen de 5 a 7 millones. Pero como no están funcionando, pues eh la idea era ayudar”, explicó. 

    Calidad del aire

    Detectan efectos de la contaminación del aire en Mazatlán

    A pesar de que actualmente el Gobierno de Sinaloa no mide la contaminación del aire en Mazatlán, hay maneras de observarla a través de sus efectos. Uno de estos, documentado por científicas sinaloenses, es la contaminación del suelo de las islas Venados y Pajaritos con metales pesados. 

    A pesar de que la cercanía del mar y su brisa ayudan a dispersar las plumas de aire contaminado, también es muy fácil que en está dispersión una cantidad de contaminantes entre al agua y alcance también a los suelos de estas islas. 

    Así, a principios de septiembre pasado, durante el Congreso Internacional Áreas Naturales Protegidas en Territorios Insulares de América Latina y del Caribe, las doctoras en ciencias, Carmen Cristina Osuna y Magdalena Bergés Tiznado, presentaron los resultados preliminares de un estudio para medir los niveles de plomo y cadmio en los suelos arenosos de estas islas frente a la costa mazatleca. 

    Y los suelos de ambas resultaron contaminados con cadmio, un metal pesado altamente tóxico que se acumula en los riñones, inhibe la absorción del calcio en los huesos y tiene efectos cancerígenos. 

    Aunque los niveles encontrados en ambas islas (de entre 4.16 y 6.57 miligramos de Cadmio por cada kilogramo de suelo seco) están por debajo del parámetro mexicano, estos sí superan la concentración de 3 Mg por KG que la OMS considera como segura.

    Al explicar este hallazgo, la doctora Bergés señaló que, por lo pequeño de las partículas contaminantes, es altamente probable que estas hayan llegado a las islas transportadas por el aire. 

    “Los niveles de cadmio y plomo en el suelo, aunque por debajo de los límites de las normas mexicanas, indican una presencia de estos elementos que puede estar asociada a fuentes atmosféricas”, explicó.

    Actualmente este estudio se encuentra en su recta final, con el análisis de dos nuevos contaminantes, y próximo a ser redactado el artículo científico correspondiente. Además, buscan replicarlo en la reserva de las Islas Marías, un sitio impactado tras muchos años de ser utilizado como cárcel, y cuyo mayor problema son los residuos sólidos. 

    Tipos de contaminantes atmosféricos

    La  Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) toma en cuenta hasta siete distintos tipos de contaminantes atmosféricos que tienen que ser monitoreados en las ciudades de más de medio millón de habitantes. Esto con el fin de cuidar posibles efectos adversos a la salud de su población y del medio ambiente. 

    Estos son el el ozono (O3), el dióxido de nitrógeno (NO2), el dióxido de azufre (SO2), el monóxido de carbono (CO), las partículas respirables (PM10), partículas finas (PM2.5) y partículas suspendidas totales (PST).

    En niveles elevados, estos contaminantes tienen diversos efectos adversos a la salud que van desde la irritación de ojos, nariz o garganta, hasta enfermedades respiratorias graves como neumonía y cáncer de pulmón y el agravamiento de enfermedades cardiacas. 

    Las partículas suspendidas más pequeñas, de 2.5 micrómetros, son tan minúsculas que incluso pueden entrar al torrente sanguíneo. 

    En su mayoría estos contaminantes son generados a partir de la quema de combustibles fósiles. Esto tanto por parte de vehículos particulares como por la quema de petróleo o gas en centrales eléctricas y otras industrias. 

    Además de medirlos e informar a la población sobre sus efectos, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda atender la contaminación atmosférica con políticas como la recuperación del gas metano de los vertederos para su uso como biogás, priorizar el transporte urbano, a pie y en bicicleta, utilizar combustibles con bajo contenido de azufre y la promoción de ciudades más compactas y con más zonas verdes. 

    contaminación del aire en Mazatlán
    Imagen tomada el 25 de enero de 2025. Foto: Son Playas.

    Son Playas
    ambiental