El humo que se generó durante el incendio del basurón de Mazatlán y que se dispersó en la atmósfera de toda la ciudad, contiene gases y partículas dañinas para la salud humana, advirtió Magdalena Elizabeth Bergés Tiznado, investigadora de la Universidad Politécnica de Sinaloa.
La doctora en Ciencias del Mar y Limnología, con especialidad en geoquímica y evaluación de daños al ambiente, manifestó que ante los niveles de contaminación atmosférica generados por la combustión de una gran variedad de desechos, es necesario que la población utilice mascarillas, de preferencia para humo y polvo, así como protección ocular en tanto se disipen los contaminantes que permanecen en el aire.
Por su parte, la Dirección de Ecología y Medio Ambiente Municipal, informó a las 13:00 horas de hoy que se encuentra realizando un estudio de la calidad del aire cuyos resultados serán entregados al alcalde. De igual forma, se recomendó a la población evitar exponerse al humo y usar cubrebocas. A esa misma hora, el Ayuntamiento de Mazatlán informó a través de un comunicado que el incendio ya fue controlado y que los cuerpos de auxilio continuaban trabajando para sofocar por completo el fuego que inició ayer alrededor de las 13:55 horas.
Así afectan la salud humana
La columna de humo y el olor a quemado se dispersó por toda la ciudad desde la tarde del viernes y durante este sábado ¿Cuál es el impacto ambiental y de salud pública que pudo haber generado este incendio? Bergés Tiznado explicó a Son Playas que la combustión pudo haber liberado a la atmósfera un conglomerado de compuestos contaminantes y tóxicos para la salud humana, plantas y animales, como el monóxido de carbono, un gas venenoso que daña el sistema nervioso central y el dióxido de azufre que daña al sistema respiratorio.
Las personas también podrían estar expuestas a compuestos orgánicos volátiles que se evaporan con rapidez en la atmósfera como el benceno, que al inhalarse en altas concentraciones puede producir somnolencia, mareo, aceleración del ritmo del corazón, dolor de cabeza, temblores, confusión y pérdida del conocimiento; incluso puede llegar a ser fatal, según la Agencia para Sustancias Tóxicas y el Registro de Enfermedades (ATSDR por sus siglas en inglés) de Estados Unidos.
La investigadora mencionó que entre los gases que suelen generarse en este tipo de incendios también se incluyen las dioxinas, un grupo de productos químicos que contaminan de forma permanente el medio ambiente y que se acumulan en la grasa de animales y en la cadena alimenticia, es decir, pasan de un ser a otro al momento de ser ingeridos.
Los contaminantes atmosféricos derivados de incendios como el del basurón también pueden contener cianuros, sustancias químicas tóxicas que actúan sobre el sistema nervioso, además de metales y metaloides que también son potencialmente dañinos, añadió.
«Es una mezcla interminable de compuestos; también pesticidas, los cianuros y el montón de otros tipos de gases, bencenos, gasolinas, grasas, aceites… puede ser una mezcla muy extensa de contaminantes», apuntó.
Ante estas amenazas para la salud humana, Bergés Tiznado consideró que la población debió ser alertada para su protección y que tanto las personas que habitan en la zona aledaña al basurón, como aquellas que quedaron expuestas al humo debieron ser evacuadas.
«Es muy muy peligroso el estar expuestos a este coctel de humo tóxico que desde ayer estamos teniendo»
Magdalena Elizabeth Bergés Tiznado, investigadora de la Universidad Politécnica de Sinaloa (UPSIN)
Daños al medio ambiente
La investigadora de la Universidad Politécnica de Sinaloa (UPSIN), indicó que parte de estar en la atmósfera, estos contaminantes también se esparcirán sobre el suelo y el agua dependiendo del patrón de dispersión del viento.
«Siempre lo que sucede en una esfera ambiental va a afectar íntimamente a la otras, aquí estamos hablando no solamente del aire, del suelo y agua, sino también estamos nosotros como biósfera», expuso.
Al llegar al suelo y a la atmósfera, los compuestos químicos liberados durante la combustión podrían alterar la producción de clorofila en las plantas, de manera que el color se torna verde pálido o amarillo, en otros casos se han detectado alteraciones en los tejidos y hasta la muerte. Al llegar al agua, estos componentes pueden acumularse en los sedimentos e impactar de diversas formas a los organismos acuáticos.
Crédito de foto principal: Amin Barraza.
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